Justin Bieber se quedó temblando pero sin lesiones después de que un fanático demasiado entusiasmado saltara al escenario en su concierto en Dubai e intentara agarrarlo en medio de una canción.

El concierto ya había causado controversia entre los fanáticos después de que Bieber subiera al escenario dos horas tarde.

El incidente, el más reciente de una serie de controversias en la gira Believe del cantante, generó ruido en redes sociales, con sus fanáticos o Beliebers apresurándose a ver que su ídolo estaba seguro.

El drama en Dubai comenzó con el enojo de muchos padres de familia que acompañaban a sus hijos ante el retraso de dos horas del concierto que forma parte de su gira global Believe.

Eventualmente, al iniciar el concierto llegó después el desastre. El cantante canadiense tocaba el piano cuando un fanático aparentemente pudo evadir la seguridad y acercarse al cantante, e intentaba poner sus brazos a su alrededor.

El fanático fue atacado por un guardia de seguridad mientras Bieber se las arreglaba para evadir sus empujones y, después de una breve pausa, continuó con la canción. Mientras tanto el fanático indefenso (y el piano) fueron aplastados, en medio de gritos desesperados de los fanáticos.

El director musical y guitarrista de Bieber, Dan Kanter, tuiteó que el incidente no era una broma; pero tranquilizó a los fanáticos al decir que no había nada de que preocuparse, "¡vayan a dormir o a hacer su tarea!", escribió Kanter a las jóvenes seguidoras de Bieber.

La superestrella permaneció relativamente calmada, y escribió después en Twitter que "nada detiene el espectáculo. Dos más por realizar. #BELIEVETour".